“Fue una estupidez increíble”, admitió Melanie Griffith, quien cuando era adolescente tenía un león como mascota. Su madre, Tippi Hendren, y su padrastro, Noel Marshall, hicieron una película sobre grandes felinos después de un viaje a África. Un entrenador de animales, por alguna razón, los animó a vivir con un león para tener una mejor idea de cómo son, así que invitaron a Neil, un león macho, a su casa.
La extraña vida hogareña de Melanie, Tippi, Noel y Neil ha sido catalogada en una serie de fotografías antiguas, tomadas cuando Melanie era sólo una adolescente. Nadie en la familia resultó herido por el león, pero Neil ciertamente podría haber matado a cualquiera de ellos en cualquier momento. En un momento, sí atacó a Ron Oxley, su dueño, durante una cena en su casa.
Después de Neil, la familia adoptó numerosos grandes felinos, lo que provocó una serie de lesiones graves.
Ahora, con 57 años, Melanie ha aprendido de la experiencia y dirige un santuario, la Reserva Shambala de California, para 32 grandes felinos. Ella es una crítica abierta de tener grandes felinos como mascotas, lo que sigue siendo una práctica legal en gran parte de los Estados Unidos.
Estas son las increíbles fotografías que documentan el tiempo que Griffith y Neil pasaron juntos.











